A través de un experimento realizado con cerca de 40 conductores de buseta en Villavicencio, la Secretaría de Movilidad les explicó cuáles son los puntos ciegos por los que comúnmente pueden transitar los ciclistas.
El experimento, que se desarrolló en los paraderos de La Madrid y Covisán, permitió a los gestores de seguridad vial ubicarse en bicicleta en los puntos ciegos que tiene la buseta, mientras los conductores trataban de observar desde su habitual lugar de trabajo.
Al bajarse del vehículo, los conductores se percataron que aunque no lograban verlos en los espejos desde la cabina de la buseta, ahí estaban los ciclistas.
“A diferencia de cómo piensa mucho la gente que somos unos atarbanes o que no sabemos conducir, a veces realmente no son fallas humanas, es que realmente no se mira alguna persona y ahí ocurren los accidentes, yo me comprometo a manejar con mucho más cuidado”, dijo uno de los conductores que participó en la jornada.
